Hacer jabón con base de glicerina es muy fácil, y obtendrás un jabón que les encantará a tu familia y amigos. Sólo necesitas base de jabón de glicerina y aceite esencial de lavanda.
El espliego (Lavandula officinalis) es conocido también como lavanda (Lavandula angustifolia) que es la variedad cultivada. Es originaria de la zona mediterránea y actualmente se cultiva en todo el mundo.
Es muy aromática y su aceite esencial es utilizado para todo tipo de cosméticos: cremas, ungüentos, perfumes, aguas de colonia…ya que es muy útil para quemaduras leves, picaduras de insectos, llagas, heridas, infecciones de la piel, etc. Tiene acción calmante, equilibradora, cicatrizante, antiséptica y es apropiado para todo tipo de pieles. Es uno de los pocos aceites esenciales que puede aplicarse sin diluir. En casos de picaduras de insectos o quemaduras se puede aplicar 1 o 2 gotas de AE de lavanda sobre la piel.
El jabón de lavanda, además de calmar y cuidar la piel, es antiséptico así que es ideal para personas ancianas o enfermas con pocas defensas naturales, protegiéndoles de eczemas, infecciones, etc.