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Crema facial antienvejecimiento

Con el paso de los años no podemos evitar las arrugas, pero si cuidamos nuestra piel con esta crema facial antienvejecimiento, retrasaremos este proceso.

Crema facial antienvejecimiento

Una buena crema, nutrirá nuestra piel, hidratándola y regenerándola. La crema que hoy te proponemos es una combinación de ingredientes que cuidarán nuestra piel. Puedes usar estos aceites que te sugerimos a continuación, o puedes substituirlos por otros aceites vegetales con propiedades cosméticas.

Ingredientes para unos 100 ml

FASE oleosa

  • 7 ml de Aceite de pepita de uva refinada (contiene antioxidantes que captan los radicales libres, ayudando a prevenir y retrasar el envejecimiento de la piel)
  • 4 ml de Aceite vegetal de albaricoque virgen (rico en ácido linoleico y omega6. Tiene una gran concentración de vitaminas A, B, C y E, potasio y magnesio. Regenera y suaviza la piel)
  • 10 ml de Aceite vegetal de jojoba virgen (suaviza, protege, regenera y revitaliza la piel)
  • 6 g de Cera nº3 de La Redoma Creativa (Glyceryl stearate SE)

FASE acuosa

  • 35 ml Hidrolato de azahar
  • 35 ml Agua destilada

ACTIVOS

  • 5 gotas de AE palo de rosa
  • 5 gotas de AE incienso
  • 1 gota de AE patchulí
  • 2 gotas de AE citronela de Java
  • 4 gotas de absoluto de azahar
  • 18 gotas de conservante bio Xaromix
  • 10 gotas de extracto de avena
  • 10 gotas de tintura de incienso

Elaboración

  1. Fundir la cera junto los aceites vegetales en otro bol, al baño María, y calentar a 65ºC.
  2. Mezclar el hidrolato y el agua en un bol, calentar al baño María hasta 65ºC (a la vez que el anterior). Cuando se alcance dicha temperatura, apagar el fuego, apartar la olla y verter la fase acuosa sobre la oleosa.
  3. Unir las dos fases removiendo activamente dentro del baño María 1 minuto.
  4. Sacar del baño María y poner sobre otro baño frío y seguir removiendo hasta pasados unos 3 minutos (hasta conseguir la emulsión estable).
  5. Dejar enfriar hasta 35ºC (aprox) y añadir los activos uno a uno y removiendo.
  6. Esperar 24 horas para valorar la textura final.
  7. Envasar en tarros bien cerrados.

En condiciones óptimas de higiene se puede conservar hasta 3 meses.

Beatriz Lavado – Bióloga y naturópata